¡Vamos a la playa, pero protegidos!
Te dejamos 5 tips para aprovechar al máximo la playa sin dañar tu piel y tu salud.
La época más calurosa del año está aquí y sabemos lo difícil que es quedarse en casa sin hacer nada. Claro que es divertido pasar tiempo con la familia viendo televisión, pero después de unos días se vuelve tedioso, por lo que las personas buscan la manera de sobrevivir al aburrimiento de verano.
Una de las actividades más comunes es ir a la playa, ya sea con la familia o los amigos. A la gente le fascina porque la playa tiene todo para hacerte feliz, desde simplemente ir a descansar con la brisa fresca y el sonido del mar, leer un libro en el proceso mientras estás tomando una deliciosa bebida y construir castillos de arena con los más pequeños de la familia hasta ver el atardecer y, claro, nadar un rato o simplemente refrescarte.
La gente termina yendo tan seguido que se le olvidan las recomendaciones importantes para la exposición solar:
1. Evitar las horas donde el sol está en su punto más fuerte.
Siempre es más recomendable visitar la playa durante la mañana o muy en la tarde, porque la exposición al sol durante las horas centrales del día es bastante dañino. Este período viene siendo de 12 del mediodía a 4 de la tarde.
2. Mantenerse en la sombra.
Es muy importante procurar no tener una exposición directa al sol en las horas más fuertes. De hecho, a pesar de no estar en ese rango de horas se recomienda tener cuidado y mantenerse en la sombra, ya sea con una sombrilla, lona, palmera, etc.
3. Usar ropa y accesorios que protejan.
A pesar de que la radiación en la sombra es más débil, el riesgo de sufrir una quemadura sigue existiendo, por lo que es importante proteger la piel, ya sea con un sombrero ancho o gorra. En caso de estar en traje de baño son recomendados los estilo buzo, que cubren los hombros y los brazos. Y por supuesto, es muy importante la protección de los ojos contra la radiación solar, por lo que unas gafas de sol homologadas son las adecuadas.
4. Hidratarse.
Al estar expuesto al sol es importante beber abundantes cantidades de agua, aunque no tengas sed. Es posible que no te des cuenta de tu deshidratación hasta que sea lo suficientemente tarde. Siempre es mejor prevenir.
5. Nunca olvidar el bloqueador solar.
Una buena opción es el Reflexsol Crema FPS 50+ que proporciona una máxima fotoprotección para pieles con exposición prolongada a los rayos UVA y UVB. Ya sean pieles de niños, jóvenes y adultos extremadamente sensibles que no toleran el sol, pieles que padecen fotodaño y pieles sometidas a tratamientos fármacos que aumentan la sensibilidad a los rayos solares.
Todos los bloqueadores solares son recomendables para usarse en cantidades generosas y regularmente mientras se esté expuesto al sol, y por supuesto no permanecer bajo el sol más de una o dos horas diarias, aunque lleve bloqueador solar.
Es importante recordar que la exposición a la radiación del sol es algo que no se puede evitar, pero en exceso puede tener consecuencias nocivas para la salud, tales como el envejecimiento cutáneo prematuro y el engrosamiento de la piel, manchas, quemaduras de la piel, cataratas en los ojos e incluso provocar el desarrollo de cáncer de piel.
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